Las pérdidas del adulto mayor y como enfrentarlas

“Corona de honra son las canas; en el camino de la justicia se encuentran” Proverbios 16:31

Las pérdidas en el ser humano están inmersas en su ciclo de vida, así como en la naturaleza las plantas, las aves y todo ser vivo, nace, crece, se reproduce y muere, también en la vida del ser humano ese ciclo se cumple en diferentes etapas. 

La naturaleza con el cambio de estación, de primavera, verano, otoño e invierno, pasa y nos deja recuerdos y grandes huellas, también la vida nuestra y de quienes amamos pasan y transciende. 

Los adultos mayores por ciclo de vida se entiende que han de fallecer, sin embargo eso no lo torna menos doloroso, ya que amamos a los nuestros y quisiéramos tenerlos siempre con nosotros.

Pero  el adulto mayor alguna vez fue bebe, niño, adolescente, joven, adulto y anciano y en cada una de esas etapas fue sufriendo pérdidas.

Las pérdidas del adulto mayor

• Sistema inmunológico: Pérdida de anticuerpos.
• Radicales libres: Hay más oxidación.
• Órganos que no se regeneran
• Cambios importantes en el sistema neurológico y endocrino.
• Órganos de los sentidos: Vista y oído
• Huesos: Osteoporosis, atrofia por falta de uso o por abuso.
• Sistema respiratorio: Endurecimiento y menor movimiento torácico.
• Sistema gastrointestinal: Lentitud digestiva, estreñimiento.
• La viudez es uno de los duelos más fuerte que se presentan en la adultez.

Existe diferencia entre hombres y mujeres en cuanto a la forma que afrontan esta pérdida, ya que las mujeres exhiben el dolor en una forma abierta, porque los varones se sienten perdidos, y esto ocasiona una alta tasa de depresión.

La jubilación es otra de las pérdidas a esta edad adulta, esta situación impacta de manera significativa al adulto mayor, también esta pérdida ocasiona depresión en el adulto mayor.

Es necesario elaborar un proceso de duelo por “vida laboral”, tener nuevos proyectos de vida es indispensable.

Por ciclo de vida la muerte de un anciano  se vive como un hecho natural. Por su edad se infiere que debe morir, obviamente no es lo mismo, si este anciano es parte de tu familia a quien amas.

Generalmente los ancianos muestran una actitud “natural” ante la muerte, imaginan y fantasean sobre la misma, aunque adopten esta postura no cabe duda que existe algo de temor ante ella y lo desconocido.

La razón del temor ante la muerte generalmente son los apegos; Los adultos mayores han ido coleccionando apegos, forman parte de su historia de vida; también hay temor al ¿cómo? Al cómo serán sus últimos momentos ¿habrá dolor? ¿sufrimiento?

Para algunos otros, la muerte es un descanso, sobre todo en aquellas que han sufrido mucho. 

En otros existe serenidad por haber tenido una existencia plena, de haber sido útil.

Sin duda alguna que en las diferentes etapas que nos toca vivir es bueno elaborar los duelos no resueltos para que esa maleta que llevaremos al final de nuestra vida sea lo más ligera posible de apegos.

La mayor pérdida en el ser humano es la muerte, puede verse como un paso más en la evolución o puede estar llena de desesperanza y miedo; por tal razón es indispensable el apoyo emocional de las personas allegadas al adulto mayor y fortalecer así sus redes de apoyo.

Las ganancias en el adulto mayor son todos los logros obtenidos durante su vida, sus pérdidas son un sinnúmero de posibilidades que pueden llegar hasta la denigración y la violencia.

Si hay alguna virtud desarrollada en esta etapa es la sabiduría que dan los años vividos.

Ayudarlo a aceptar la vida que ha vivido sin remordimiento.

Dejar atrás lo “debería haber hecho”.

Trabajar con sus pérdidas simbólicas.

Hablarle sobre lo que implica vivir un duelo.

Algunas recomendaciones para el trato con los adultos mayores: 

• Considerar las modificaciones en el proceso de comunicación; debido a que los órganos y sentidos sufren cambios degenerativos.
• Se altera la percepción del mundo.

Echemos mano de: 

• Sus memorias 
• Sus recuerdos
• Su biografía
• Álbumes de fotos
• Religión
• Reconocer su legado
• Familia
• Agradecimiento
• Hacerle ver que aún no termina de escribir su historia.

Recordarle que como dice E.K.R  “Ninguna vida es en vano”.

La Biblia sabiamente declara en Salmo 71:19 “No me deseches en el tiempo de mi vejez; no me desampares cuando mi fuerza se acabe”.

Por tal razón es necesario fomentar la sensibilidad y el respeto hacia el adulto mayor.

La Biblia habla claro al respecto cuando dice en Levítico 19:32 “Ante las canas te pondrás de pie. Darás honor al anciano y tendrás temor de tu Dios. Yo, Jehovah”.

La vejez…

Mienten los que dicen que la vida
es la copa dorada y engañosa
que si de dulce néctar se rebosa
ponzoña de dolor guarda escondida.

Que es la juventud senda florida
y en la vejez, pendiente que escabrosa
va recorriendo el alma congojosa
sin fe, sin esperanza y desvalida.

¡Mienten! Si a la virtud sus homenajes
el corazón rindió con sus querellas
no contesta del tiempo a los ultrajes;
que tiene la vejez horas tan bellas

Como tiene la tarde sus celajes,
como tiene la noche sus estrella.